Entre inconformidades y con más enemigos, el panista Anaya es candidato del Frente

  • - Por: Sara Martínez M.

 

* “Autodedazo. Lo que siempre negó. Qué vergüenza”, condena Felipe Calderón; la candidatura a la CdMx será para Barrales del PRD

 

 

Propinando una derrota mayúscula al ex gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle Rosas; generando inconformidades de cuadros históricos del panismo, división en los partidos que conforman el ahora llamado “Por México al Frente” y el rompimiento con el presidenciable perredista Miguel Ángel Mancera, el ex dirigente del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del Partido Acción Nacional (PAN), Ricardo Anaya Cortés, se convirtió en el virtual candidato a la Presidencia de la República de esa alianza que conforma su partido con el de la Revolución Democrática (PRD) y Movimiento Ciudadano.

Luego de días de negociaciones en las que también se dejó la candidatura para la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México a los perredistas, en la figura de su ex dirigente, María Alejandra Barrales Magdaleno, el panista renunció este sábado a su cargo para estar en condiciones de convertirse en precandidato.

Este domingo se espera el acto de apoyo y cargada de los panistas a favor del ex diputado federal y oriundo de Querétaro, quien mantiene un litigio contra el diario El Universal que destapó las inconsistencias de su enorme patrimonio personal y familiar.



Mancera dice adiós

Aunque en declaraciones mediáticas el perredista Miguel Ángel Mancera Espinosa, jefe de Gobierno de la capital del país, todavía la tarde del viernes amagaba con participar en la contienda por la candidatura presidencial de la coalición que ha sido tildada de “antinatura”, pero su mismo partido lo bajó al aceptar al queretano.

En este sentido, desde la mañana del sábado, Mancera lamentó la decisión y que no haya habido método democrático. Dijo que rechazó un cargo de segundo nivel y también la coordinación de la campaña, pues se quedará al frente de la Ciudad de México, para encabezar la reconstrucción.

Fui informado por representantes del PRD, partido que me designó como su candidato a la presidencia de la República, que la mesa de diálogo para la conformación formal de la coalición Por México al Frente se había acordado que no habría una contienda interna, ni método alguno para designar al candidato común de ésta.

Que al tomar como criterio el peso político y de representación de los partidos, sería el Partido Acción Nacional quien llevaría la preferencia para postular candidato a la presidencia de la República. Y que el PRD, por su parte, tendría la correspondiente a la jefatura de gobierno de la Ciudad de México”.

Anaya fue en este proceso juez y parte y deja una larga estela de rencores entre sus correligionarios y como damnificados, principales, a Rafael Moreno Valle Rosas y Margarita Esther Zavala Gómez del Campo, quien incluso renunció a su militancia de más de tres décadas al albiazul por considerar que no había equidad ni democracia.

El esposo de Zavala, el ex habitante de Los Pinos Felipe de Jesús Calderón Hinojosa atacó desde su twitter a Anaya: “Autodedazo. Lo que siempre negó. Qué vergüenza”.

Ya con días de antelación, otros panistas como el presidente del Senado, Ernesto Cordero Arroyo, y su compañero de bancada Javier Lozano advirtieron que Ricardo Anaya era el candidato, ellos preferirían apoyar al abanderado priísta José Antonio Meade Kuribreña.



El sí se pudo

El viernes pasado, al registrar la coalición “Por México al Frente”, Anaya aseguró que los objetivos de ésta son acabar con la corrupción, con la impunidad, con la pobreza y la desigualdad, así como recuperar la paz y la seguridad en nuestro país, que la economía que crezca para todos.

Festejo que, pese a los constantes ataques del gobierno y que muchos los “daban por muertos”, “aquí estamos; sí se pudo”.

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